El río Emajõgi en Tartu.
(Foto © Albert
Lázaro-Tinaut)
A ORILLAS DEL EMAJÕGI
El
pequeño Sísifo recoge
piedras del suelo y juega con ellas.
Calles, casas, autos.
Una luz suave y menuda en su pelo,
ráfagas de brisa. Las piedras más pequeñas
se pueden poner encima de las grandes,
así sale una torre. Luego lo arroja
todo por tierra y se ríe.
Los otros niños no quieren
jugar con él. Algunas niñas sí.
La que tiene el pelo largo.
Sísifo encuentra una piedra
especialmente linda, es de un rosa suave
con rayas claras. Esa la deja
aparte, se la mete en el bolsillo, no la enseña
a nadie. Los dos van a crecer
y hacerse grandes juntos.
piedras del suelo y juega con ellas.
Calles, casas, autos.
Una luz suave y menuda en su pelo,
ráfagas de brisa. Las piedras más pequeñas
se pueden poner encima de las grandes,
así sale una torre. Luego lo arroja
todo por tierra y se ríe.
Los otros niños no quieren
jugar con él. Algunas niñas sí.
La que tiene el pelo largo.
Sísifo encuentra una piedra
especialmente linda, es de un rosa suave
con rayas claras. Esa la deja
aparte, se la mete en el bolsillo, no la enseña
a nadie. Los dos van a crecer
y hacerse grandes juntos.
Carolina Pihelgas
Poeta, traductora y editora estonia nacida en Tallinn el 24 de febrero de 1986.
Poeta, traductora y editora estonia nacida en Tallinn el 24 de febrero de 1986.
Versión de Consuelo Rubio y Jean
Portante.
(Fuente: La Otra, Revista de Poesía,
México, núm. 132, 2018.)
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