El Boquerón, cráter del volcán Quezaltepec o de San Salvador.
QUEZALTEPEC
La
noche fue dantesca... En medio del mutismo
rompió de pronto el retumbar de un trueno...
Tropel de potros que rompiera el freno
y se lanzara, indómito, al abismo...
rompió de pronto el retumbar de un trueno...
Tropel de potros que rompiera el freno
y se lanzara, indómito, al abismo...
Un
pálido fulgor de cataclismo,
al cielo que antes se mostró sereno,
siniestramente iluminó de lleno,
como si el cielo se incendiara él mismo...
al cielo que antes se mostró sereno,
siniestramente iluminó de lleno,
como si el cielo se incendiara él mismo...
Entre
mil convulsiones de montaña
se abrió la roja y palpitante entraña
en esa amarga noche de penuria...
se abrió la roja y palpitante entraña
en esa amarga noche de penuria...
Y
desde el cráter en la abierta herida
brotó la ardiente lava enfurecida
como un boa incendiando de lujuria.
brotó la ardiente lava enfurecida
como un boa incendiando de lujuria.
Alfredo Espino
Poeta salvadoreño nacido en Ahuachapán el 8 de enero de 1900.
Poeta salvadoreño nacido en Ahuachapán el 8 de enero de 1900.
Se suicidó en San Salvador el 24 de mayo de 1928.
La última erupción del Quezaltepec,
conocido también como volcán de San Salvador,
se produjo el 7 de junio de 1917.
Es la que recuerda el poeta.
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