Atenas

LOS PERROS DE ATENAS

En Plaka, alrededor de la Acrópolis
y por varios otros lugares,
son muchos los perros que vagan y duermen.
Perros grandes, vivaces, corteses.

Con entusiasmo propio de escolares
traducimos la lengua conocida y profunda,
y tomo fotos de los perros:
rubios, blancos y negros.

“No se ve ningún perro pequeño.”
Te iluminas y brillas como un hombre de ciencia:
“¡Los más pequeños ya se han muerto!”
Y centellean tus ojos azules.

¡Antiguamente, la almendra era venenosa,
el guisante, pequeñito,
el hombre, un ser sanguinario!
¿O puede que no?

Somos más altos que nuestros ancestros.
Y tú y yo, sobre todo muy corteses.
“Hay no sé qué de melancolía
en los perros que han sobrevivido.”

“¿Se han comido a los otros, esos amables perros?”
Cenamos para honrar la memoria
de los cínicos (los auténticos)
y bebemos a la salud de los perros corteses.

Maarja Kangro
Poeta, prosista y libretista estonia, nacida en Tallinn el 20 de diciembre de 1973.

 
Versión de Jüri Talvet y Albert Lázaro-Tinaut

(Foto © María Belmonte)